¿Y si de repente estallo?

- Mamá, ¿qué pasaría si de repente estalló?.
- Pues que no habría cubos suficientes para recogerte.
Me quedé blanco, la idea de autodestruirme y dejar pedacitos míos en más de dos kilómetros a la redonda me fascinó.
Me llevó mucho tiempo conseguirlo, pero al final lo hice.
Empece con los petardos, metiéndolos dentro de naranjas y limones, para luego pasar a mayor tonelaje con melones y sandías. Me gustaba ver cómo saltaba todo en pedazos desde dentro hacía afuera.
Luego, ya más mayor, hacía bombas de aguafuerte en el parque.
También hice cocktails Molotov.
Y ahora con 22 años es mi momento, lo tengo todo controlado. Tengo novia, amigos, una familia que me quiere y un futuro desesperanzador, como casi toda la gente.
Por fin ha llegado el momento de saltar todo por los aires, concéntrame y explotar, y llenar la ciudad de mi sangre, y que jamas lleguen a encontrar todos mis pedazos.