martes, marzo 15, 2005

Perdiendo el tiempo

Llevo toda la tarde observando como se pudre el esqueleto de la pera que me comí de postre.
Algunas veces perdemos el tiempo de manera estúpida, mi especialidad en estos meses.
Puedo estar una hora cambiando de canal una y otra vez hasta llegar a convencerme de que verdaderamente no ponen nada en la televisión.
Puedo bajar a la calle y andar a pasos tan cortos que me adelanta la señora del "tacataca".
Una vez me puse a leerme el periódico de los domingos entero, y también el suplemento dominical, no os lo recomiendo.
Me gusta salir al balcón y mirar como pasa la gente, a veces pienso que tengo un fusil con mira telescópica y me los voy cargando, no pasa nada, no tengo ningún problema serio, no lo haría de verdad,... creo. El más difícil de matar es el perro rata de Doña Remedios, no sé si esta señora en realidad se llamará así, pero tiene cara de Doña Remedios.
Con lo que mejor me lo paso es con la comida, juego con ella como si estuviese haciendo un capitulo de "Los Fruitis".
Cuando estoy muy nervioso y no tengo paciencia me pego para calmarme, no pasa nada, no tengo ningún problema, lo que pasa es que soy fácilmente excitable.