miércoles, septiembre 22, 2004

Diálogo

-Secuencia 1. Una habitación de noche, un restaurante poco iluminado, un banco de un parque una noche de luna llena, cualquier paisaje sirve para el momento, si queréis, un cabaret del Berlín de entre guerras.

Personaje 1: ¿Qué quieres que te diga? No lo sé, estoy nervioso.
Personaje 2: Esperaba algo más..., pero supongo que nada es como esprabamos, que nada permanece tan perfecto como en nuestra imaginación.

p1: Cuando recibí tu llamada..., empecé a sentirme mal del estomago, un nudo,...
p2: Yo creo que tengo un agujero del tamaño de plutón en mi estomago, de todo el ácido que ha segregado mi estomago.

p1: Ójala pudiera tomar la iniciativa, pero el escritor no me ha dejado, ha dicho que tengo que ser el desequilibrado mental que soy...
p2: No pasa nada, a mi me ha obligado a llevar el tema de la conversación.

p1: No valgo para tomar iniciativas, soy torpe a la hora de la verdad, jamás sé lo que tengo que decir en estos momentos.
p2: Yo creí que serias mejor, tenias tanta planta, me tratabas tan bien...

p1: No sirvo, no hablemos más de esto, me siento mal, me siento un fracasado, me siento tan mal que no necesito que me estés reprochando tantas cosas. Yo te quiero, más de lo que he querido a nadie en mi vida, lo he dado todo por ti, y ahora...
p2: ¿Qué haces? ¿Por qué tomas la iniciativa? Si se entera el escritor desaparecerás, morirás en un accidente de trafico, caerás de un ascensor, tendrás una enfermedad irreversible, morirás...

p1: ¿Y qué? ¿No te gustaría que ocurriera algo así?, ¿Que yo desapareciera para siempre?
p2: No, creo que te sigo queriendo...

Los personajes se quedan en silencio mientras la luz se va a negro, todo permanece en espera hasta que la luz se paga.

FIN